Los roles que los clientes asocian al diseñador web

Hace algún tiempo te comenté de un pequeño experimento que hice para reducir las reuniones presenciales que sostengo con mis clientes y, a decir verdad, ha funcionado bastante bien. Por si no leíste ese post, se trata básicamente de un formulario que pido llenar a todos mis prospectos de diseño web antes de concretar una reunión o presupuesto.
Una de las cosas que más me ha llamado la atención de las respuestas recibidas es lo que las personas responden a l ser preguntadas ¿cuál es el objetivo del sitio web?. En todos los casos las respuestas han sido del tipo: «Modernizar nuestra imagen», «Presentarnos de una forma más profesional», «convencer a los clientes de trabajar con nosotros».
Como diseñador aprecio estos comentarios, sin duda son valiosos, sin embargo, todos ellos son muy relativos y superficiales. Ninguno es realmente medible ni dice relación directa con el valor real que el sitio web puede tener en su negocio.
Pienso que esta falta de datos duros en las respuestas se debe, en parte, a que los clientes no conocen la real importancia del sitio y en parte, a que la pregunta pueda estar mal formulada o requiere mayor detalle.
De todos modos, esta situación me ha hecho reflexionar sobre cuál es el rol que los diseñadores cumplimos para los clientes o, al menos, cuál es el rol con el cual ellos nos asocian.
A continuación hay 3 cosas que en algunos casos me han pedido hacer y que han llamado mi atención:
Crear un sitio bonito
Como mi profesión es la de «diseñador» especializado en la web, muchas veces los clientes (por desconocimiento principalmente) han creído que mi misión es la de hacer cosas bonitas, pero no es así.
Un diseñador, es más bien un estratega, que sabe analizar y entender el negocio de sus clientes para generar soluciones, que habitualmente se basan en el uso de códigos visuales y estéticos para conseguir los resultados esperados.
En este contexto, mi rol como diseñador web no es el de hacer que un sitio sea «bonito«, sino entender las necesidades del negocio de mi cliente y las necesidades de los clientes de mi cliente, para poder generar un puente, a través del sitio web, en donde converjan estas dos necesidades y encuentren una solución.
Por un lado, los clientes de mi cliente deberían encontrar en el sitio web las respuestas que buscan, al mismo tiempo que mi cliente debería obtener resultados reales de parte del sitio web.
Este rol de estratega, a veces implica decirle NO a los clientes, para anteponer las necesidades de su negocio por sobre sus «gustos personales«. Hay que decirles que ese color que tanto les gusta no es el apropiado para llegar a su audiencia; decirles que un logo que ocupe casi la mitad de la pantalla, como ellos lo quieren, no hará que los clientes decidan comprarle más; decirles que poner esa animación con tantos efectos sólo reducirá sus oportunidades de conversión; y así sucesivamente.
Dependiendo de la envergadura de cada proyecto, el rol estratégico, puede implicar trabajar en equipo junto a un experto en marketing, un periodista, un productor audiovisual, etc. Pero en otras ocasiones implicará simplemente trabajar en solitario.
Sin duda, cualquier sitio que pase por manos de un buen diseñador, siempre tendrá una calidad estética muy alta, algo que podríamos considerar bonito. Sin embargo, es mucho más que eso, es un sitio funcional, cuyo diseño se enmarca dentro de una estrategia que está pensada para cumplir con los objetivos comerciales del cliente y con las expectativas de los clientes del cliente.
Aparecer primeros en Google
En más de una ocasión he escuchado algo como esto:
Actualmente no tenemos sitio web y queremos que nos hagas uno para que cuando los clientes busquen por X concepto, nosotros seamos los primeros en aparecer en Google.
No me molesta que me digan esto, porque entiendo que básicamente se trata de desconocimiento del tema, pero no deja de llamarme la atención la inocencia de creer que simplemente con tener un sitio web pueden aparecer primeros en google.
Mi rol como diseñador web no es hacer que el sitio web de mi cliente aparezca en primer lugar de los resultados de búsqueda, sino diseñar y desarrollar el sitio de manera estratégica para que éste sea funcional una vez que los visitantes lleguen.
Sin duda los sitio que desarrolle deberían estar preparados para ser amigables con los motores de búsqueda y estar optimizados para facilitar el rastreo, pero esto en ningún caso asegura un posicionamiento perfecto.
Alcanzar el puesto Nº1 en la primera página de google, de manera natural es algo bien complejo y que toma mucho tiempo de esfuerzo constante. Eventualmente se puede alcanzar de manera rápida por un tiempo determinado mediante campañas pagadas AdWords.
Ambas opciones, tanto el posicionamiento orgánico como el pagado forman parte del trabajo de un experto en marketing digital (como mi amiga Tamara Cuevas), aunque a veces para proyectos de pequeña envergadura, yo mismo podría hacerme cargo de estos temas.
Como diseñadores web, no podemos ser ignorantes en estos temas y debemos poder entenderlos y aplicarlos, pero siempre dejando claro que el diseño/desarrollo y el marketing digital son temas aparte, que sin duda van muy de la mano, pero aparte al fin y al cabo.
Por lo general cuando diseño un sitio web, en alguna reunión, suelo compartir algunas ideas generales con los clientes acerca de cómo podrían hacer que su sitio logre posicionarse pero siempre son ideas generales que terminan con una recomendación de algún profesional del marketing.
Coaching de negocios
Ok, es cierto que tengo cierta experticia dentro del diseño web y también que tengo conocimientos de marketing online y que he sabido utilizar estos conocimientos para ir generándome de a poco un nombre y poder ganar algo de dinero mediante la venta de productos digitales (cursos), pero eso no necesariamente me convierte en la persona indicada para hacer un coaching de negocios.
Cualquier diseñador web espera que su cliente tenga claro su propio negocio antes de ser contratado para diseñar un sitio.
No es la misión de un diseñador web, tener una reunión con el cliente para hacer un análisis de su negocio y decirle qué productos vender, a qué precio y bajo qué condiciones.
Sin duda hay gente mucho más capacitada para ello y con mucha más experticia en el área de los negocios.
Nuevamente, al igual que con el ítem del marketing digital, eventualmente un diseñador web con mucha experiencia en cierto tipo de negocio podría ofrecer el servicio de «business coaching«, pero es un servicio individual y aparte del diseño web.
Otros casos
No quiero que se me malinterprete: en ningún caso me estoy quejando de estas situaciones. Es evidente que se trata de solicitudes basadas en el desconocimiento de los clientes sobre el rol que los diseñadores web cumplimos y que, conversando amistosamente les podemos hacer entender .
Sin duda hay muchas otras cosas que los clientes pueden pedir que están en parte o completamente fuera del rango de acción de un diseñador web, pero para este post ya tenemos suficiente con estas tres.
Cómo diseñador web ¿te ha tocado recibir solicitudes que estaban fuera de tu rol? ¿cuáles?. Me encantaría que pudieras compartir tus experiencias en los comentarios.